SOS-SOPLO DE SANTIDAD
LO QUE NOS PIDAS HAREMOS
Liturgia Viva del NUESTRA SEÑORA DEL MONTE CARMELO
Sábado, 16 de julio de 2016
Introducción
La Biblia canta las glorias del Monte Carmelo, ya que el profeta Elías había permanecido allí para conservar y promover
la pureza de la fe de Israel. En el siglo XII D.C., un grupo de eremitas se retiró a esta montaña y posteriormente fundaron la Orden de los Carmelitas, que se dedicaría a la vida contemplativa bajo el patronazgo de María, Madre de Dios.
Oración Colecta
Señor Dios nuestro:María, la madre de tu Hijo Jesucristo,
estuvo siempre abierta a la palabra de Dios
con una mente y un corazónllenos de fe y de confianza.
Hoy, en este día en que la honramos
bajo el título de Nuestra Señora del Carmen,
queremos confiarnos a ti como ella lo hizo,
meditar tus palabras y buscar en todo tu voluntad.
Haz que tu voluntad sea la nuestra,
que nos lleves a tu casa celestial
guiados por aquél que buscó siempre
y en todo tu voluntad,
Jesucristo nuestro Señor.
Oración después de la Comunión
Señor Dios nuestro:
Haz que sepamos, como María,
rumiar y meditar en nuestro corazón
la palabra que Jesús nos ha proclamado hoy,
Que su mensaje guíe nuestras vidas
e ilumine todo lo que hagamos.
Y que el pan reconfortante de tu Hijo, la eucaristía,
nos dé la voluntad y el valor
para hacer del evangelio
el fundamento de nuestras vidas.
Te lo pedimos por Jesucristo nuestro Señor.
Lecturas del Sábado de la 15ª semana
del Tiempo Ordinario
Sábado, 16 de julio de 2016
Primera lectura
Lectura de la profecía de Miqueas
(2,1-5):
¡Ay de los que meditan maldades, traman iniquidades en sus camas; al amanecer las cumplen, porque tienen el poder! Codician los campos y los roban, las casas,
y se apoderan de ellas; oprimen al hombre
y a su casa, al varón y a sus posesiones.
Por eso, dice el Señor: «Mirad, yo medito una desgracia contra esa familia. No lograréis apartar el cuello de ella, no podréis caminar erguidos, porque será un tiempo calamitoso. Aquel día entonarán contra vosotros
una sátira, cantarán una elegía: "Han acabado
con nosotros, venden la heredad de mi pueblo;
nadie lo impedía, reparten a extraños nuestra tierra." Nadie os sortea los lotes en la asamblea del Señor.»
Palabra de Dios
Oración sobre las Ofrendas
Señor, Dios nuestro:
Este pan y este vino
son signos de que
estamos dispuestos a buscar tu voluntad,
siempre unidos a Jesús y a María,
Permítenos participar en esta mesa santa
como familiares suyos, hermanos y hermanas,
y seguirles en su camino de fidelidad
hacia ti, Dios nuestro
que vives y reinas por los siglos de los siglos.
SOS-SOPLO DE SANTIDAD
MINISTERIO CATOLICO MISIONERO DE EVANGELIZACION
LO QUE NOS PIDAS...HAREMOS
A DONDE MANDES IREMOS . . .
A A DONDE MANDES...IREMOS
MINISTERIO CATÓLICO MISIONERO DE EVANGELIZACIÓN
Salmo responsorial
Sal 9,22-23.24-25.28-29.35
R/. No te olvides de los humildes, Señor
¿Por qué te quedas lejos, Señor,
y te escondes en el momento del aprieto?
La soberbia del impío oprime al infeliz
y lo enreda en las intrigas que ha tramado. R/.
El malvado se gloría de su ambición,
el codicioso blasfema y desprecia al Señor.
El malvado dice con insolencia:
«No hay Dios que me pida cuentas.» R/.
Su boca está llena de maldiciones,
de engaños y de fraudes;
su lengua encubre maldad y opresión;
en el zaguán se sienta al acecho
para matar a escondidas al inocente. R/.
Pero tú ves las penas y los trabajos,
tú miras y los tomas en tus manos.
A ti se encomienda el pobre,
tú socorres al huérfano. R/.
Evangelio
Lectura del santo evangelio según
san Mateo (12,14-21):
En aquel tiempo, los fariseos planearon el modo
de acabar con Jesús. Pero Jesús se enteró,
se marchó de allí, y muchos le siguieron. Él los curó
a todos, mandándoles que no lo descubrieran.
Así se cumplió lo que dijo el profeta Isaías:
«Mirad a mi siervo, mi elegido, mi amado,
mi predilecto. Sobre él he puesto mi espíritu para que anuncie el derecho a las naciones. No porfiará,
no gritará, no voceará por las calles. La caña cascada no la quebrará, el pábilo vacilante no lo apagará,
hasta implantar el derecho; en su nombre
esperarán las naciones.»
Palabra del Señor